Estamos en una provincia del interior de Cataluña, cuya paisajística está claramente enfocada a los viajes de aventura y de naturaleza gracias a los Pirineos Catalanes. Precisamente en este punto nos centramos en el Parque Nacional de Aigüestortes, una inmensa extensión natural en la que los más aficionados a los deportes de nieve son los privilegiados de unas vistas en las que los picos nevados y escarpados tienen aquí todo el protagonismo.
Pero no solo su orografía es de destacada mención, pues su patrimonio artístico e histórico no se queda atrás.
Ejemplo de ambas vertientes son Montseny y Solsona, además de otros municipios a destacar. El primero por su reserva de la Biosfera y su tupido y colorido paisaje. El segundo, por sus construcciones, como la iglesia románica y su conjunto gótico.
Punto aparte es su gastronomía, que ostenta varias denominaciones de origen en productos tan básicos y necesarios en la dieta mediterránea como la pera, los quesos o el aceite de oliva, elementos que hacen de sus platos típicos, una auténtica delicia.
Además, si vienes a hacer turismo rural en Lleida podrás complementar la paz y la relajación con otras actividades más peculiares o exclusivas, como una ruta en tren de vapor.