Casas Rurales con Barbacoa en Olba

Buenos nuestro paso por la casa fue una experiencia que no vamos a olvidar y os aseguro que volveremos, de esta manera se lo afirmamos a Roberto, el que en el instante que nos cara falta algo allá lo teníamos, teneis una aldea cautivadora y muy agradable, felicitaciones..... Nos desplazamos desde Albacete treinta y uno personas entre pequeños y mayores a pasar 4 días, arrendamos la aldea completa( cuatro casas) y deciros que las instalaciones están listas para conjuntos grandes puesto que entre la barbacoa y el salón grande de unas de las casas hemos estado muy cómodos, los peques pero incluso puesto que solo los veíamos en las comidas y a dormir, para ellos el ambiente es idea,l sin riesgos y sin tanto aparato tecnológico que les circunda en su vida diaria, Comentar que desde la casa se pueden hacer multitud de sendas senderistas y en bicicleta(WIKILOC).

Hace unas semanas hicimos una escapada a una de las casas de la Masía Collado Royo, llevábamos tiempo procurando ir mas siempre y en toda circunstancia estaba ocupado, nos lo había recomendado un buen amigo y lo cierto es que, lejos de desilusionarnos, nos ha impresionado todo en extremo, la casa, completamente pertrechada, cómoda, caliente, agradable, las proximidades realmente bien cuidadas y limpias, la barbacoa, una maravilla, el trato con los dueños buenísimo, afables y atentos en todo instante, verdaderamente desconectamos y descansamos, hacía tiempo que no me sentía tan bien, volveremos seguro, mas vamos a llamar con cierta antelación por el hecho de que si no, es imposible, mil gracias por hacer realidad este sueño, hasta siempre y en todo momento.

Hemos pasado unos días en familia en Olba, que desde la perspectiva del pueblo y del rincón es una maravilla. Mas sobre todo cuanto nos agradaría resaltar es el alojamiento en la Casa de Los Moyas, con todo género de comodidades, de confort, de buen gusto y atención a los detalles.Todo estaba tan cuidado que nos dio la sensación de que la estrenábamos. Y sobre todas las cosas eso el trato afable y afable de su dueña, Teresa, que nos ha hecho sentir tal y como si fuésemos conocidos de siempre.

Hemos estado hace unos días con toda la familia,niños ,tios,hermanos ,cuñados,etc.y ha sido un decubrimiento para nosotros este lugar,parece patraña que a solo 1h. en turismo de Valencia exista este sitio. Llegamos pendientes por ver donde nos ibamos a alojar ,como nos ocurre siempre y en todo momento a todos cuando preparamos un viaje, y nada pero llegar nos hallamos con una aldea que había sido restaurada con un buen gusto,acierto y limpieza que enseguida nos transmitió buen rollo y sobre todo la calma de saber que habiamos atinado.

Un alojamiento que prácticamente estrenamos, todo estaba muy limpio, muy nuevo y con todos los detalles que se os puedan ocurrir. El entorno natural invita a hacer excursiones y después del deporte una buena comida, en la zona se come a las mil maravillas. Rosa la propietaria es un encanto, seguro que volveremos a verla en nuestra próxima escapada.

Solo tengo cosas buenas que decir, estuvimos con un conjunto de amigos y con pequeños, la casa fue Peñablanca , es bella y se aprecia que está cuidada y construida con mucho amor. El trato con Fernando ha sido estupendo , está súper pendiente de todo y presto a asistirte con cualquier cosa en cualquier instante. A la casa no le falta detalle y tiene de todo. El ambiente es fantástico, toda la sierra de Gúdar en su esplendor, íbamos a desconectar y relajarnos y no se me ocurre un sitio mejor, nos hemos ido enamorados del ambiente, de las casas y de Fernando!

Nosotros que vivimos en un ambiente rural nos enamoró el paisaje, la casa, el dueño, la limpieza, las estancias, normalmente todo. Los "guachos" (pequeños) lo pasaron muy realmente bien, el primero de los días no paraban de allá para allí viéndolo todo, escogiendo habitación, gozaron de lo bonito con los zorros que se aproximaban a comer y con los gatos que hay por ahí que son super cariñosos.

Desde el primer instante en el que te recibe Carlos, notas que estarás agusto en la casa, atentísimo y detallista. La casa en si, es amplísima y llena de luz, con apenas 1 año desde el instante en que se edificó, el moblaje y electrodomésticos son nuevos, prácticamente a estrenar, viajamos con amigos y pequeños y fue una disfrutada, cuatro habitaciones cerradas tres de ellas con cama de matrimonio y otra con dos camas individuales, todo con jergones muy cómodos y mullidos, entonces hay otra habitación abierta con otras dos camas individuales de noventa.