Dentro de la provincia de Granada nos encontramos, si levantamos mucho la mirada, el municipio de Trévelez, una joya entre las montañas que forma parte de la Alpujarra Granadina, y que se encuentra dentro del Parque Nacional de Sierra Nevada.
Se divide en tres barrios: alto, medio y bajo, que van desde el río Trévelez, uno de los mejores para la pesca de la trucha, hasta el pico Mulhacén, con parte del entramado encajado entre las montañas. Como puedes imaginar, no sólo es el pueblo más alto de Granada y Andalucía, también es el pueblo de mayor altitud de toda la Península, llegando a alcanzar los 1.476 metros.
¿Cómo llegar? Seguramente te estés preguntando cómo puedes llegar hasta este pueblo, y la forma más sencilla es en coche, accediendo por la A-4132 en una empinada subida que te llevará hasta esta joya. También hay autobuses de líneas regulares que te suben hasta aquí.
Trévelez proviene de la palabra latina velex que significa valle y que podría hacer referencia a los tres valles en los que se reparten los diferentes barrios.
Si quieres saber un poco más sobre su historia, sólo tienes que caminar por un casco urbano en el que la tradición se palpa en cada construcción. Esta zona fue ocupada por los moriscos, que llegaron a las Alpujarras y se asentaron en sus montañas. Tras su expulsión, todas las poblaciones comenzaron a ser habitadas por los andaluces.
¿Qué ver y hacer en Trévelez?
Aunque el pueblo en sí no es muy grande y de hecho se puede recorrer en un día tranquilamente, sí puedes disfrutar de una gran cantidad de puntos de interés.
La iglesia de San Benito, al que sus habitantes le tienen mucha devoción y en honor al que se celebran sus fiestas en el mes de julio. Se encuentra en el Barrio Bajo es uno de los puntos más característicos de la zona, datando del siglo XVI y contando muy cerca, con una senda en mitad de la naturaleza que dura unos 2 kilómetros y que os llevará hasta el puente de piedra, una de las mejores cosas que ver con niños.
Otro de los referentes para su cultura religiosa es la ermita de la Virgen de las Nieves, que se construyó con la piedra del Mulhacén y en una de las cimas.
Con la ubicación en la que se encuentra Trévelez no es raro adivinar que su agua tienen mucha calidad y que además baja filtrada de la montaña. Es por esto, que en esta población vas a encontrar varias fuentes que mrece la pena que visites y que están decoradas. Algunas de las más importantes son la del Castaño y la del Mulhacén. La belleza de estos elementos tan característicos y tradicionales hace que sean objetivo de las fotos de la mayoría de los turistas.
Pero si hay algo que no te puedes perder son los famosos jamones de Trévelez, de altísima calidad y reconocimiento por su curado natural al aire puro de Sierra Nevada. Tienen Denominación de Origen y a lo largo de esta población vas a poder ver diferentes secaderos de jamones donde comer este rico manjar.
Con todo esto, ¿quién podría resistirse a pasar unos días? Si ya te has enamorado de este pueblo, puedes disfrutar de un alojamiento de alquiler de larga temporada o si lo prefieres, reserva una casa rural en esta zona de la Alpujarra o un hotel en el que descansar.