Casas Rurales con Chimenea en Fermoselle

Respeto es la palabra que define esta experiencia. Esta casa rústica respeta el entorno rural del pueblo, los propietarios respetan las costumbres y el medio ambiente, un alojamiento que dice todo de ellos, te dejan libros de la zona, los cuales tienen el sello de su propietario, Victor. Te visita un perro negro precioso muy sociable por la mañana, varios gatitos hambrientos, unas cuantas gallinas y lo mejor la zona en la que se encuentra ubicada, fantástica.

Hemos pasado el puente de San Isidro en la casa de la cuadra, el alojamiento está fenomenal, con mucha zona verde para que los peques se lo pasen genial, el nuestro se lo ha pasado fenomenal (no quería irse, decía que se quería quedar 100 días), le han gustado mucho los burritos, las gallinas y los garitos. Nosotros hemos estado súper a gusto, tranquilidad absoluta, la zona es espectacular y el pueblo está muy bien situado para realizar excursiones por la zona. Agradecer a Víctor los detalles que tuvo con nosotros, el pan, las magdalenas y los huevos recién puestos de las gallinas (estaban riquísimos), también por la información que nos dió de la zona, la gente del pueblo muy amable, en fin que nos hemos ido con pena y esperamos volver.

Alojados en La Casa de la Cuadra, entre adobes y madera, recibiendo la mañana con el canto del gallo, tres borricos bonachones nos venían a saludar. Parecía un tiempo nuevo, a un paso de la infancia. Luego, con lluvia a ratos, y sol después, a buscar el Duero que jugaba al escondite, entre jaras y encinas por tajos de piedra que no acababan nunca. Pero encontramos al Douro, que por ese nombre atiende cuando le llaman desde la otra orilla.

Mi pareja y yo nos alojamos en "La Cuadra" del 13 al 20 de Enero. La vivienda es muy acogedora, caliente y cómoda, perfecta para dos personas, tranquila, solo se escucha el gallo todas las mañanas. Si te gustan los animales, esta casa es perfecta, ya que está rodeada de mimosos gatos, burros, y gallinas con su respectivo gallo. Las zonas comunes, a compartir con las otras dos casas, como la piscina, el salón-comedor para hacer barbacoa, aparte de la zona de patio que tiene cada alojamiento, y aunque no pudimos disfrutar de ellas por la época en la que nos hemos alojado, tienen muy buena pinta para un tiempo más cálido.

Llevamos quince años haciendo turismo rural y en todo este tiempo no hemos escrito jamás comentario alguno en las páginas que se dedican a esta clase de actividad, tal vez pues hasta el instante no habíamos tenido ninguna experiencia capaz de motivarnos a redactar sobre ella. Hemos podido hallar ciertas buenísimas experiencias, mas siempre y en toda circunstancia hemos echado de menos algo que lograse despertar dentro de nosotros el sentimiento de lo natural en su estado más puro en contraposición a nuestra frecuente vida urbana.

Hemos pasado 4 semanas del mes de aosto en Trabanca y, entre las muchas cosas que han contribuído a que las vacaciones hayan sido espléndidas, está el que la casa Zapatero, en la que hemos estado, es genial, realmente bonita, puesta con mucho gusto y muy cómoda. Mas mejor que la casa, son los dueños. Nosotros resaltaríamos su predisposición a hacer agradable la estancia. Siempre y cuando se les requiere están allí: Isabel, con su simpatía y su agradibilísimo trato; y Lurio con su sabiduría sobre todo lo relacionado con su pueblo y región.

Estuvimos en el Puente de la Almudena en la Casa Zapatero, la familia con 2 niños pequeños y fue una estancia inmejorable. La vivienda turística de alquiler cuenta con todas las comodidades igual que si estuvieras en tu casa. La limpieza y comodidad de las camas es excepcional, dormimos muy bien las 9 personas que estuvimos. Aunque si algo tiene este alojamiento de fantástico son sus dueños Isabel y Lurio gente encantadora, siempre dispuesta a ayudar y que te enseñan a disfrutar de su pueblo y de sus alrededores.

Decidimos ir a visitar Los Llegues del Duero en Semana Santa, me habían hablado realmente bien de la zona y tenía interés en conocerlo. Empezé con mucha antelación a buscar alojamiento y merced a mi anticipación pude reservar en los alojamientos Llegues Durii. La elección fue de lo más atinada, he quedado encantada con este lugar. La casa Llegues Durii está ubicada en una finca, en pleno Parque Natural de Llegues del Duero, justamente en la carretera que une Zamora con Fermoselle, en el km cincuenta y seis.

Es la quinta vez en 6 años que volvemos a la Alquería. Si no fuese por la distancia ( vivimos en Barna) es seguro que nos habríamos perdido considerablemente más veces a este sitio. Tanto a mi mujer como a mí . siempre y en todo momento nos sorprende que casas y lugares de estas caracteristicas no tengan sus plazas ocupadas sobre todo en estos meses de vacaciones. Honestamente creo que cuando menos para aquellos que procuran la naturaleza, la calma, los paisajes que alientan a la paz mental.

Hemos pasado allá el pasado puente de San José cinco personas. La casa perfecta, tal como aparece en las fotografías, con todo lo preciso y cuidando el detalle. Como hizo buen tiempo, pudimos gozar de una barbacoa en la terraza. El ambiente insuperable. Los dueños cautivadores. Nos explicaron todo cuanto podíamos visitar por la zona si bien nos han quedado sitios pendientes, con lo que indudablemente volveremos.

Este puente del Pilar estuve con mi novio en los alojamientos de Víctor y puedo decir que hemos vuelto encantados. El sitio estaba muy limpio y equipado y Víctor es un encanto de persona, se ha preocupado de que estuviésemos bien, a gusto y que no nos faltase de nada. Mencionar el restaurante asador que hay justo al lado, se puede cenar por un precio ecónomico y está todo buenísimo, sin olvidar lo amables que han sido los empleados con nosotros, recomiendo a todo el mundo alojarse aquí unos días y darse un homenaje en el restaurante asador.

¡Increíble!...(¡y creo me quedo corto!!!), aunque la casa es una belleza en la que se cuidan todo lujo de detalles, no os hablo de sus dueños: simpatía, cariño, cariño y toda la experiencia de aquellas personas que aman a su tierra y que vierten su ilusión para hacer ver a aquel que lo quiera lo fantástico de esta zona tanto en el aspecto paisajístico como el gastronómico.

Lo cierto es que pintaban muy mal el tiempo, mas creo que el Lago de Sanabria tiene un microclima singular. He pasado con mi familia estos 3 días de celebración con un tiempo inmejorable en esta casa, cerca del Lago de Sanabria, en pleno Parque Natural. Nos ha faltado tiempo para todas y cada una de las cosas que hay que hacer allá, cerca de exactamente la misma casa. Prácticamente no hay que moverse para coger setas, castañas, manzanas.