Casas Rurales que Admiten Perros en Siles

Hace años estuvimos tambien en verano en el Cortijo rústico la Besana. Nos ha sorprendido muy gratamente, la casa de campo está bien conservada e incluso mejor equipada que antes. Y sobre todo los árboles de sombra de las explanadas que rodean la vivienda vacacional han crecido y se crea un amplio espacio sombreado alrededor que se disfruta mucho. Entre la buena sombra, la piscina y lo fresquita que es la casa hemos estado en la gloria.

Es un alojamiento rústico pequeño y bien llevado. Personas amables con ganas de colaborar. El restaurante de al lado es muy barato y muy bueno, digo barato porque el precio del menú es el de los menús de trabajadores, 10 euros. Y digo muy bueno porque cocinan estupéndamente y lo más rápido posible te atienden. El entorno está estupendo, con posibilidades de muchísimas excursiones. Pero si no te quieres mover, cosa que entiendo porque la temperatura es estupenda, tienes piscinas grande y pequeña, campo de fútbol, minigolf y badminton.

Pasamos una semana maravillosa en Orcera. Ramón y su familia hicieron siempre para que nos sintiéramos como en casa. Además de la piscina y el área de la piscina bien cuidada, la propiedad también albergaba gallinas, gatos, perros y un caballo. Esto fue una gran ventaja para nosotros, ya que Ramón nos permitió ayudar a lavar el caballo y buscar huevos. El pueblo de Orcera era pequeño, pero encantador, pero el parque nacional que lo rodeaba era asombrosamente hermoso con muchas actividades; rafting, trekking con impresionantes vistas y natación además de mucho más.

Un sitio insuperable para reposar, un genial ambiente con interesantes visitas. Buen acceso mas con carretera angosta y muchas curvas. La casa nos ofreció un servicio bueno. Pese a las elevadas temperaturas nos atrevimos hacer múltiples barbacoas. No tiene piscina mas una alberca bien cuidada hizo de substituto que fue un encanto. El reposo y la calma fue total. Se hecho en falta la aproximación de un pueblo donde caminar de noche y tomar alguna cosa, si bien a pocos quilómetros teníamos el Balneario de Tus, donde por las noches ofrecen unas tapas variadísimas a buen coste.

La verdad que encontramos lo que íbamos buscando. Un viaje de naturaleza en estado puro y poder relajarnos junto a la chimenea. Los alojamientos son muy bonitos y están bastante bien equipados, lo único que mejoraríamos seria un sofá más confortable para poder estar tumbados junto a la chimenea, aunque con las dos mecedoras también se disfruta. El entorno es envidiable con el río pasando junto a las casas y el trato fue excelente.