Casa do Concello

Entre la naturaleza de las sierras y valles de León, algo escondido del ruido del mundo, en el aún desconocido pueblo de Arnado, la piedra y la madera crecieron entre los árboles para levantar una preciosa vivienda que se adapta perfectamente al entorno y al estilo serrano de la zona en la que se encuentra.

Hace 120 años, en ella encontraba descanso una familia de labradores, y hoy podrán hacerlo ustedes, gracias a la restauración que hemos hecho de ella, en la que hemos conservado al máximo su estructura original en paredes, suelos y tejado, brindando de esta forma homenaje al estilo y la más pura tradición rural de la zona.

• En sus amplios espacios interiores pueden alojarse hasta 7 personas, distribuidas cómodamente en 2 plantas independientes. Además, ponemos a disposición de nuestros clientes el edificio anexo a la casa, antigua capilla, donde hoy pueden disfrutar de grandes banquetes al calor del fuego.

• En el interior de la vivienda, al acceder a la misma, se encuentran una amplia cocina con mesa de comedor en el centro y un gran armario, y un amplio salón, además de una despensa donde conservar bajo las mejores condiciones la comida.

• La cocina, a la que se puede acceder desde el exterior, está completamente equipada. Hemos dispuesto en ella una moderna placa donde cocinar, además de un amplio frigorífico, un lavavajillas, un gran horno y un microondas. Entre los amplios armarios se encuentra un más que variado menaje entre una coqueta vajilla y ropa de cocina, que podrán lavar en la práctica lavadora que también se encuentra en la estancia.

• Por una puerta se accede al salón, donde hay varios amplios sofás en torno a un precioso baúl y un arca antiguo, que encierran entretenidas y cuidadosamente seleccionadas colecciones de juegos de mesa de los que disfrutar en familia, además de algunos libros. Sobre una pared está la televisión, de la que podrán disfrutar bajo el confortable calor de la chimenea.

• En la planta principal, a través de un largo pasillo de madera, típico de la arquitectura de la zona, podrán encontrar los 3 dormitorios de la vivienda. 2 de ellos son de matrimonio, y el otro tiene 2 camas individuales. A pesar de esta pequeña diferencia, todos gozan de una gran amplitud e iluminación, gracias a las ventanas a través de las que se puede acceder a la amplia terraza, además de un variado y detallado mobiliario, entre el que hay grandes armarios, bonitas mesas de noche con lámparas, alfombras y sillas o bancos, todo ello tallado en madera y bajo el calor de los radiadores.

• En todas las habitaciones, además de una ropa de cama cuidadosamente seleccionada, hay baños completamente equipados con cómodos lavabos, duchas e inodoros, que cuentan con agua corriente fría y caliente, mucha luz y toallas para todos nuestros huéspedes.

Por último, la vivienda destaca así mismo por un bonito porche exterior, que hemos amueblado con una mesa y 2 escaños para que nuestros huéspedes puedan disfrutar de los productos típicos de la zona en el aire más puro, mientras escuchan el canto de las lechuzas, los gorriones o ruiseñores de Arnaldo.

El pequeño y poco conocido pueblo de Arnado está situado en tierras leonesas, no muy lejos de la frontera de Castilla y León con Galicia. Aunque pequeño, sus tierras resultan muy fértiles, lo que favorece a la agricultura, gracias al paso por ellas del río Selmo y del Arroyo Rebelo.

Desde Arnado, precisamente, es donde se inicia una ruta, antiguo camino de carros, entre la naturaleza del valle de Rebolo, que culmina en el pico Motouto, a 1.600 metros sobre el nivel del mar, en el límite entre las provincias de Lugo, Orense y León. A su paso, los aventureros se encontrarán con especies como abedules, castaños, alisos, robles y fresnos, que crecen en las riberas del arroyo, y entre los que viven especies como petirrojos, reyezuelos, chochines o mitos.

Al inicio del sendero, hay un bonito horno de pan, sobrevolado por los gorriones, ruiseñores, lechuzas y mochuelos que encuentran en Arnado el lugar perfecto en el que establecer su hogar. A lo largo de la ruta, destacan bonitos puentes de madera, algunos restos de molinos, verdes prados, cabañas donde vivían y aún viven los pastores que quedan en estas tierras y una antigua ferrería del siglo XV, Val do Rebolo.

Pero esto no es todo, y es que Arnado es el lugar perfecto para aquellos a los que les guste la naturaleza. Además de la ruta ya citada, los turistas podrán disfrutar de largas excursiones por el Parque Natural de la Sierra do Caurel, en el sur de Lugo, subir hasta la Peña do Seo, o admirar los paisajes de la Sierra de la Peña de Lastra