Casas Rurales con Barbacoa en Lukiano

El caserío está en un entorno precioso, decorada muy acorde con ese entorno natural. Los propietarios te hacen sentir como parte de la familia desde el primer día. Añoro los desayunos de Carmen, que pone gran esmero en que sean contundentes, con productos naturales y todos los días con alguna sorpresita.

Esta vivienda vacacional es inmejorable, decorada al mas mínimo detalle, cosa que nos asombró ya que la gente a veces no cuida las cosas y ya se sabe. Es preciosa, amplia y cómoda. La dueña está de vecina pero casi ni la hemos visto, muy discreta y amable. El entorno es muy tranquilo y perfecto para descansar y dar largos paseos. Os recomiendo que lo visiteis se desconecta de la ciudad, y para estar con amigos es perfecto, incluso hace años que no jugaba al parchís y este finde lo hice.

Fuísteis unos maravillosos guías para que conocieramos lugares de Vitoria y de Álava en Octubre. Nos encantó Vitoria (estuvimos en el descenso del Celedón) y la Rioja Alavesa. Francamente os animamos a seguir con vuestro trabajo pues creo que teneis mucho que ofrecer. La próxima vez esperamos disfrutar en el desayuno de los huevos de corral de vuestro recién instalado gallinero.

Hemos quedado encantados con la casa , los dueños y los vecinos que son familia , nos han tratado maravillosamente, el desayuno chapo, el entorno familiar , los caballos , la huerta , la amiga de marcos, que todo el rato preguntaba cuando vamos a la casa de la pequeña, los aledaños de quedarte con la boca abierta y eso que no había agua por ser verano, mas debemos regresar en invierno para poder ver la catarata y el nervion, la gastonomia de la zona, una pasada de fin de semana para vivirlo.

Un caserío vasco con todo lo que necesitas para pasar unas vacaciones tranquilas y alejadas del mundanal ruido. Está todo preparado para conservar el encanto de una fisca rústica y que puedas vivir el entorno rural en medio del campo entre las montañas. Hemos aprovechado para hacer turismo por el País Vasco gracias a las buenas recomendaciones de Ana, la propietaria que nos ha ayudado mucho a organizar el viaje.

Hemos pasado un fin de semana en esta casa de campo un grupo familiar compuesto por 13 personas entre adultos y niños y como no también nos acompañaba Trosky, nuestro perro. Decir que el alojamiento es excepcional es poco, muy bien equipado, bien acondicionado en cuanto a calefacción, baños, cocina, no le falta un detalle ni un servicio. Además estando en las afueras está muy cerquita de Vitoria-Gasteiz con lo que no cuesta nada ir a visitar una ciudad tan bonita y limpia con ésta.

Nuestra estancia en Izpiliku se puede resumir en una oración "sitio caluroso y cautivador". Puesto que su localización es insuperable, se halla rodeado de un hermoso rincón natural vasco, y a pocos minutos de todos y cada uno de los puntos de interés de Euskadi: los must seen: Parque natural de Gorbea, Vitoria y a menos de 1h de la costa. Nos alojamos en el piso Avena, una pequeña casa de 2 plantas con una genial decoración rústica, limpia, ordenada y funcional; la que incluía una cocina - comedor/ salón y una enorme suite?.

Hemos estado disfrutando una cuadrilla de amigos (6 adultos + 1 bebé), de un fin de semana de septiembre en la casa rural. Solemos hacer, como mínimo, 2 o 3 escapadas al año a casas rurales, y desde luego, está dentro de las mejores en las que hemos estado. Sus amplios espacios, equipamiento completísimo, mobiliario con gusto... Además, Inma, la propietaria un amor, el cariño con el que nos explicó todo el alojamiento, reflejaba sin duda el cariño por el turismo rural.

Estuvimos con amigos de alquiler el tercer fin de semana de Marzo en esta casa rural y destacar la experiencia que pasamos, la amplitud de la vivienda con un gran jardin en un sitio de total descanso en el monte, la posibilidad de realizar muchas actividades al aire libre, así como jugar en su pista de tenis, préstamo de bicicletas y senderismo. Es un caserío muy tranquilo y acogedor, ideal para estar una larga o corta temporada, ya que dispone de muchas opciones que nosotros no pudimos disfrutar, por lo que nos queda pendiente el volver. La ubicación es inigualable, tranquila y con unas vistas maravillosas, rodeada de naturaleza además de tener cerca ciudades tan bonitas como Bilbao y Vitoria. Nos sorprendió la generosidad y amabilidad del dueño y sobre todo la calidad precio. Somos una cuadrilla que solemos salir mucho y nos alojamos en turismos rurales, ya que nos encanta este tipo de experiencias y este caso nos hemos sorprendido gratamente.