Casas Rurales con Jacuzzi en Alpuente

Sitio rústico encantador en Alpuente. Camas con dosel, tumbonas en el patio y ambiente medieval. Cerca del cauce del río Turia, hicimos una excursión al Parque Natural de la Puebla de San Miguel. Desde este punto podéis pasaros a Aragón y a Castilla la Mancha. Los propietarios estuvieron muy pendientes de hacer nuestra estancia agradable. Podéis también desplazaros a Alpuente que se come muy bien.

El pasado fin de semana de mayo estuvimos en esta casa rural, la alquilamos al completo siete familias con un montón de niños y nos lo pasamos genial. Los mayores, muy a gusto y estupendamente atendidos por Alina (que realmente es un encanto y nos ayudó en todo) y los pequeños se lo pasaron tan bien, que ya están pidiendo volver. El entorno tiene unos paisajes preciosos, la gente del pueblo y las cercanias son amables y acogedores y las casas son perfectas y tranquilas, rehabilitadas con gusto y respeto a la tradición, pero con todas las comodidades.

La casa es sencillamente maravillosa, plagada de detalles que te sumergen en un entorno rural perfectamente cuidado. Limpia, confortable y cuidadosamente equipada. Mis hijos la describieron como "la casa rural más bonita que hemos estado nunca". Y, como niños que son, es totalmente cierto. Los dueños son dos personas maravillosas, que nos acogieron con un trato exquisito.

Hemos pasado un fin de semana genial en la urbanización la Cuevarruz. Es un complejo de casitas muy bien puestas en las que tus vacaciones se harán muy agradables. Nosotros estuvimos en dicimebre y la chimenea funciona muy bien y en la casa se está calentito. Hay rutas y sendas para dar paseos por la zona y despejarse.

El pasado mes de diciembre, nos alojamos en el alojamiento 3. Dos parejas, buscando descansar del ruido de la ciudad y del estrés diario. La casa estaba equipada totalmente, televisor de plasma, lavavajillas, lavadora, incluso música propia del cau dels somnis. Pudimos disfrutar d un agradable paseo en bici, con un poco de frío pero con unas vistas muy bonitas. A pesar de las temperaturas nos ofrecieron disfrutar del jacuzzi, que tras el paseo en bicicleta resultó muy gratificante.

La verdad es que se nota que Ricardo, el propietario, ha invertido tiempo y buen gusto en poner el alojamiento a las mil maravillas. Como amante del turismo rural que me considero os recomiendo visitar los pueblecitos que hay en la zona, me gustó especialmente la sabina milenaria "La Juana". Si hablas con los dueños te acompañan en la ruta y te recomendarán sitios de interés turístico y cultural.