Casas Rurales con Chimenea en Galaroza

La vivienda turística un 10 y Mercedes otro 10. Como siempre un placer haber estado en tu casa. Es de las mejores viviendas que podéis encontrar y el trato de la propietaria es espectacular, todo facilidades. La casa es comodísima y perfectamente equipada. El entorno maravilloso y la situación del alojamiento no puede ser mejor. Pero esto no es todo, si pensáis comprar chacinas, paletillas o jamones, no os molestéis en buscar una tienda, Mercedes tiene unos productos ibéricos de bellota, de Cerdos que ella misma cría, con la mejor relación calidad precio que vais a encontrar en los alrededores y sólo con llamarla ella os lo lleva.

La ubicación es muy agradable y la vivienda como tal está bastante bien como casa de campo con dobles cristales en las ventanas, suelo, baño y cocina correctos en cuanto a sanitarios y muebles, etc). Sin embargo pensamos que a la vivienda le falta mantenimiento.

La casa en general está bastante bien, estuvimos 3 parejas y 3 niños y no hubo problema de espacio. Lo que sí es muy pequeña es la piscina que además, es compartida. Tuvimos la suerte de que durante nuestra estancia la otra casa no estaba ocupada por lo que no tuvimos que compartirla. La vivienda turísica está muy bien equipada y se nota la reforma reciente, por lo que por ese lado genial. El camino para llegar está perfecto, excepto el último kilómetro que es de tierra y es un poco complicado.

Fuimos un grupo de 16 amigos a pasar el fin de semana del 20 al 22 de enero en "La Serrería" y no sabría por donde empezar porque todo es bueno. Aunque sé que soy repetitiva tengo que decir que la casa es infinitamente mejor de lo que se vé en las fotos. Nada más llegar estaban allí Mercedes y su hijo y todo fueron facilidades y amabilidad, nos tenían encedida la chimenea y la calefacción para que la casa estuviese calentita, además de tenernos unos pastelitos, que por cierto, estaban riquisimos, para merendar.

He ido con mi pareja a este alojamiento durante las vacaciones del mes mayo y ha sido todo un éxito. Nos gusta viajar con nuestras mascotas y para el propietario no ha supuesto ningún impedimente. Días soleados y noches frescas por su proximidad con la sierra, a la que hemos ido a hacer alguna que otra excursión de senderismo. A la vuelta se ha agradecido el jacuzzi y toda la zona del porche en la que hemos charlado de lo vivido durante el día preparando alguna barbacoa.

Descubrí de casualidad esta casa hace cuatro años creo. Desde ese momento he ido 3 o bien 4 veces. Pepe la ha hecho con cariño y se aprecia. Mis hijos desde ese momento me preguntan cuando vamos a regresar a la casa de piedra. Pocos sitios en la sierra de Aracena tan cautivadores. La pena es que no he logrado regresar, puesto que jamás está libre. Proseguiré intentandolo. Es verdad que el camino no es perfecto, mas que más da.

Mi nombre es Pilar he ido con mi marido del once de Enero al catorce de enero de dos mil doce. He gozado muchisimo en la casa, es increible lo bien decorada y con el mimo que esta hecha, semeja que entras en un cuento, la chimenea es además de ser realmente grande, una belleza, que decir que para mi gusto y mira que me recorrido casas rurales, esta con diferencia se lleva la palma a la casa mejor decorada, mejor cuidada y con vistas a las comodidades de la gente, Regina un encanto nos dejo una botella de vino en la casa, entonces cuando la conoci me encanto su forma de ser, la casa es un reflejo de ella.

Nuestra familia, perra incluida se alojó en el Castañero. El sitio es hermoso, la casa está dotada de todas y cada una de las comodidades, limpia, bonita...con muchos detalles de calidad que hacen la estancia muy realmente agradable. Los dueños son atentísimos y agradables. Un trato delicioso. Se aprecia que tienen mucho estilo tanto profesional como personal. Viajamos con pequeños pequeños y el sitio es ideal a fin de que jueguen y anden a sus anchas sin riesgo.

El verano pasado estuvimos una semana mi familia: Ximo, Lala, mauro y Miquel. Qué maravilla hallar esa casa y ese sitio tras un largo y caluroso viaje desde Valencia. El lugar perfecto, José superamable sin caer en la pesadez, la balsa, la calma, los animales, las arañas, todo nos pareció increíble. Fue una desconexión total y cuando terminó no deseábamos regresar mas al final lo hicimos con una sonrisa en los labios.

La finca Camino del Castaño nos ha semejado tanto a mi como a mis amigos, un lugar fantástico. Las casas están realmente bien adaptadas, con buen gusto y MUY cómodas. La cocina es realmente bonita con una decoración excelente. Descansamos realmente bien, el alimento en la sierra muy buena, el trato con los dueños super afable. El ambiente es bello, espero regresar y gozar nuevamente de las instalaciones que tan esmeradamente han preparado. Gracias Berta!