Casas Rurales con Chimenea en Donostia San Sebastian

Era nuestro primer viaje juntos a San Sebastián. Pedro ya había estado alguna vez y a mi me hacía muchísima ilusión ver, pasear y bañarme en la playa de la Concha. No sabíamos dónde alojarnos y descubrimos a traves de internet este caserío. No podíamos haber escogido mejor. La casa es preciosa y está decorada con mucho gusto. Despues de un día recorriendo los pueblos de Guipuzcoa no habia nada mejor que volver a "casa".

Nosotros hemos estado tres días en este bello caserío, deseábamos visitar San Sebastián mas al unísono contar con de espacio verde a fin de que pudiesen jugar las pequeñas y este caserío es justo lo que buscabamos. Estábamos cerca de Donostia, cerca del centro comercial y cerca de otras salidas por si acaso lo que quereis es visitar otras localidades. Además de esto nos alojamos en la habitación que tienen para cuatro personas, que realmente son 2 habitaciones independientes y que me semeja una idea excelente cuando se viaja con pequeños, ya mayorcitos, y deseamos tenerlos cerca mas al unísono gozar de un tanto de amedrentad.

mi mujer y , al lado de mis hijos y una parte de mi familia (cuñado/a y mi sobrina), hemos estado en esta casa rural, que si bien está en plena naturaleza, tienes a pocos minutos en turismo, el mismísimo casco viejo de San Sebastian. Que decir de la casa, quizás la limpieza, la decoración, el ambiente etcétera, que si bien para mi gusto está perfecto, no es lo pero resaltable, lo que verdaderamente te deja mejor sabor de boca y con ganas de regresar, es la afabilidad, disponibilidad, atención y las ganas de gustar de la familia que administra LASKIN ENEA, (Joseba, su mujer y también hijos, Anne y Aitor).

Descubrimos Maddiola a lo largo de nuestro reciente viaje al país Vasco y nos hemos enamorado. No es solo una zona excepcional por su belleza y exhuberancia, sino es un sitio donde es muy fácil sentirse en caso por la gente fantástica y por la calidez y acogida que brindan. El alojamiento fue estupendo y confortable; los ninos descubrieron su pasión por la naturaleza y el placer de "asistir" en las tareas de nutrir los animales; mi hija se levantaba temprano para ir a buscar las ovejas (cada día había una oveja toma nueva para exquisitez de los chiquitines), los conejos, y las vicuñas; mi marido re-descubrió su pasión por la cocina y la cidra (no lo puedo inculpar) y merced a has proezas culinarias del dueño ahora estå poniendose el delantal pero con frecuencia :-).

La estancia durante una semana en Casa U54 ha sido excelente. El alojamiento cuenta con muchos puntos a su favor. La ubicación es ideal, porque se encuentra en una zona tranquilísima a 3 minutos en coche de la ciudad y a 10 del casco antiguo. La casa se encuentra en una parcela amplísima delimitada por una valla, en la que se combina la zona ajardinada y una parte arbolada. La vivienda se encuentra en perfecto estado y dispone de todas las comodidades para pasar unos días. La limpieza al llegar también fué correcta. El dueño ha sido amable y se ha mostrado dispuesto a resolver cualquier duda.