El Planot

Masía rural que se encuentra a menos de 70 kilómetros de Barcelona en el el bonito municipio de Pontons.

Una casa de hace 2 siglos, que ha sido reformada por dentro para poder incluir todos los servicios necesarios para que te sientas como en casa. 

La casa cuenta con 2 dormittorios: 

• Un dormitorio doble con cama de matrimonio amueblado y decorado de manera muy rústica con un toque bastante elegante. Juegos de sábanas y mantas en color blanco que aportan pureza y relajación y que se integra de manera perfecta con un cabecero y mesillas en tonos marrón oscuro. El detalle grande de la habitación es una pared de piedra que le aporta el toque perfecto. 

• Otro dormitorio doble pero con 2 camas individuales, también con mobiliario de madera y esta vez paredes en tonos color vino que quedan muy bonitos y juveniles. 

El baño, dispone de bañera y además os preparamos los juegos de toallas para que podáis hacer uso de ellos durante toda vuestra estancia. 

El resto de la casa está dividido en cómodas estancias en las cuales os reuniréis todo el grupo de amigos o la familia: 

• La cocina, equipada con electrodomésticos en perfecto estado y muy actuales, ha mantenido el fuego a tierra que tenía la casa. Este contraste de material la convierten en una cocina bastante especial. 

• El salón tiene una zona destinada al descanso con un gran sofá frente al televisor y en otra parte una mesa de comedor de madera bastante grande. 

En el exterior de la casa nos encontramos unas vistas muy bonitas a la naturaleza y estamos rodeados de jardines de los cuales podremos hacer uso. Un merendero y una barbacoa se encuentran ubicados aquí para que podáis pasar entretenidos ratos de comilonas al aire fresco. 

Pontons es la bonita localidad en la que nos encontramos. Rodeados de naturaleza, destaca por sus colores verdes y por los cielos azulados. Si visitamos el pueblo, de no más de 450 habitantes, podremos descubrir la capilla de Sant Joan de la Muntanya a lo alto de la colina que se encuentra rodeado de masas forestales y cuyo contraste lo convierten en un precioso entorno o la iglesia de Santa Magdalena, reconstruida en el siglo XIII y de origen románica. 

Visitar Barcelona puede ser otra opción si queremos salir de la naturaleza y sumergirnos en la gran ciudad por un rato. De igual manera podemos disfrutar de la playa de la Barceloneta y pasear por rincones mágicos que desprenden toques de Gaudí. En lo alto de la cima, en el Montjuic se encuentra su castillo, una antigua fortaleza militar que representa una parte importante de la ciudad.

Si paseamos por el barrio gótico nos toparemos de frente con la Basílica de la Merce, que es una de las más representativas de Barcelona. 

Planes variados en un viaje que puede resultar muy interesante. Podemos encontrar la tranquilidad de la naturaleza y a la vez empaparnos de cultura recorriendo las calles de la cosmopolita Barcelona.