Casas Rurales con Barbacoa en Isora

Estoy muy contenta con la atención que recibí de todos los propietarios de la casas rurales de Antonio García. Me pasé durante junio junto con mis amigos unas maravillosas vacaciones en la isla y espero regresar pronto.

Magnífica vivienda vacacional y magnífico trato. Recomendamos esta casa de campo porque es una de las mejores casas rurales en las que hemos estado: buena situación, magnifica decoración y equipamiento completo, amplia. Los niños disfrutaron muchísimo en los espacios abiertos que presenta.

Nos alojamos en Semana Santa aprovechando las vacaciones de los niños, pasamos unos días maravillosos. La vivienda cacacional es perfecta, el entorno idílico y el descanso está asegurado. La encargada de la casa de campo nos atendió de maravilla y nos encontramos con una cesta de bienvenida bien aprovisionada con productos de la isla. Aprovechamos para practicar senderismo, caminando por la red de senderos que están perfectamente señalizados.

Toda la familia nos hemos alojado en las 3 habitaciones de la casita rural, son espectaculares: disponen de aire acondicionado, televisión por satélite, los colchones son muy cómodos para descansar, los muebles con artesanales, muy originales y adaptados al entorno, el piso es de barro hecho a mano, los techos son de madera, los cuadros son originales, muy bonitos, etc. La rehabilitación se ha hecho con mucha delicadeza, cuidando todos los detalles.

Utilizamos las dos viviendas y la zona común para barbacoas donde hicimos una paella y donde comimos perfectamente 14 personas. El lugar ha sido reformado con un gusto exquisito. La zona es especialmente tranquila como la isla en general. Nuestra estancia en el mes de abril coincidió con los almendros en flor. En la propia finca rústica hay varios. La localización es perfecta para recorrer el hierro pues casi equidista de todo.

Pasamos siete días de noviembre, una época del año en la que no hay muchos turistas, buscando un lugar tranquilo donde descansar después de las excursiones. Resultó ser una casa muy acogedora en un entorno realmente rural. Es espaciosa con gran cuidado de detalles, etc. En definitiva nos encantó y volveremos.

El alojamiento está situado estratégicamente para poder hacer turismo rural por la isla, en el pueblo de Isora en el noreste de la isla, cerca de la Montaña de las Rosas. Nosoros pasamos allí la semana santa y ha salido todo increíble, el entorno precioso porque comenzaba la floración y disfrutando de unas vacaciones en las que hemos comido muy bien y hecho muchas excursiones. Además tiene una zona de barbacoa perfecta para organizar parrilladas.