Casa Mabara

Disfruta de una estupenda estancia en nuestra casa rural, situada en la localidad tarraconense de Riumar.

Esta fantástica ubicación te dará la posibilidad de disfrutar de un entorno natural único como es el Delta del Ebro.

Cuenta con espacio para cuatro personas, donde podrás alojarte con tu familia, donde niños lo pasarán especialmente bien en la zona exterior.

Este espacio está formado por una amplia terraza que dispone de mobiliario, además de una gran piscina de uso exclusivo donde darte un baño siempre que quieras.

En el interior encontramos un espacio moderno con algunos elementos de estilo algo más antiguos que aportan calidez al ambiente de la casa, y donde encontramos las siguientes estancias:

• A la entrada, el salón, de forma alargada, donde se ubica un espacioso sofá en un bonito color verde y al frente la televisión planta, sobre un bonito mueble a juego con la mesita auxiliar entre ambos.

• La cocina está integrada en el salón y cuenta con un equipamiento suficiente para que puedas cocinar cómodamente durante tu estancia. Junto a ésta se encuentra la mesa de comedor, muy amplia, y que separa los dos ambientes.

• Dos dormitorios dobles, con una cama de matrimonio y dos camas individuales respectivamente, que, en ambos casos, cuentan con armario en un espacio muy luminoso y con vistas al exterior.

• La casa cuenta con un cuarto de baño completo, de línea moderna dominada por el color blanco, que se equipa con una cabina de ducha acristalada.

Las mascotas son bienvenidas, aunque se aplicará un suplemento por día y animal.

Los protagonistas del paisaje del Delta del Ebro son, indiscutiblemente, sus infinitos campos de arroz, que forman una bella imagen especialmente en primavera, cuando toman un intenso color verde.

Estos campos favorecen el hábitat de multitud de especies de aves, y por ello es un espacio protegido, además de ser un lugar idílico para los amantes ornitología.

Y no debemos olvidarnos de sus espacios de playa, con una arena fina, que son perfectas para pasar un maravilloso y contemplar los espectaculares atardeceres.