Singularvillas- Villa Carolina

Preciosa villa con finca de 2500 m² y capacidad para albergar a 13 personas adultas, en el precioso enclave de Corrubedo entre los pueblos coruñeses de Espiñeirido y Seráns, en la cautivadora comarca de Noia.

Este alojamiento dispone para el uso y disfrute de sus huéspedes de las siguientes instalaciones:

• 5 Dormitorios de tamaño doble de los cuales 3 tienen camas de matrimonio y los restantes cuentan con un par de camas individuales gemelas. Todas las estancias están decoradas con un gusto exquisito, componiendo en cada caso una atmosfera diferente pero siempre igual de acogedora. Las habitaciones tienen amplios ventanales y proyección exterior, lo que tratándose de una casa situada en el promontorio que se alza en medio de la finca, les garantiza buena iluminación natural en algún momento de la jornada, también dependiendo de la orientación y la época del año, claro está.

• El salón es un espacio inundado de luz natural, puesto que dos de sus fachadas exteriores se abren al horizonte de la costa, lo que en el caso de sus puertas de cristal nos da la impresión de que podríamos meter el pie en el mar directamente al salir de casa. En el centro de la estancia hay una moderna chimenea de tubo, situada frente a ella una confortable chaise-longe de gran tamaño y justo del otro lado de la estancia un tresillo que también disfruta de la influencia de este fuego controlado, así como lo podrán hacer cada uno de los ocupantes de los muchos asientos individuales de diseño que lo se hallan dispersos por el resto del espacio. En una doble altura se encuentra un estiloso conjunto de comedor para 6 comensales.

• La cocina, que dispone también de un pequeño comedor alternativo para 4 personas, abre sus encimeras en una barra que promueve la interacción social entre las personas que cocinen y los que no lo hagan. En este espacio diseñado en líneas geométricas simples, se integran con gracia todos los electrodomésticos que componen el completo equipamiento de que dispone y que harán las delicias de los más gourmets.

• Los 4 baños de que dispone la vivienda son completos, con cabinas de ducha de diferente calado, cada una encajando, al igual que pasaba con los dormitorios, con el diseño que configura espacios diferenciales pero siempre agradables a todos nuestros sentidos, empezando por el de la vista. La casa cuenta además con un aseo como alternativa de uso higiénico.

• En el cuarto de hectárea que ocupa la extensión de la finca, donde todo son jardines recubiertos de césped, encontramos varios rincones de estilo chill-out haciendo salóncitos de exterior y núcleos de camas balinesas. No muy lejos del porche que hay al salir de la vivienda, donde se ha dispuesto un cenador para 6 personas, encontramos la barbacoa de obra junto a otro conjunto de mesa y sillas más pequeño. Y presidiendo este espacio privado de exterior engarzada en un solárium con tumbonas, se dispone la preciosa piscina con que cuenta la propiedad.

Si hemos escogido este alojamiento sin saber lo que lo rodea hemos tenido mucha suerte, puesto que se trata de una zona que tiene muchos y diferentes hitos de interés de diferentes tipos.

En lo que se refiere a enclaves de naturaleza reseñables en un término cercano encontraremos el Parque Natural de las Dunas de Corrubedo, una extensión de 1000 hectáreas arenal móvil que se ha venido formando desde hace más o menos unos 15.000 años, por lo que se entiende bastante bien las dimensiones de una anchura de 250 metros, hasta 20 de altura y más de un kilómetro de longitud acompañando el litoral. Para respetar esta formación geológica, en el parque se han dispuesto unas pasarelas de madera desde las que podremos contemplar perfectamente la magnitud del arenal, así como también las lagunas tanto salada como dulce de Carregal y Vixán, uno de los puntos de observación ornitológica preferidos no lo en la provincia sino en toda la costa atlántica ibérica.

Otro enclave natural a disfrutar en los alrededores es la Fervenza de Cadarnoxo, con una ruta circular de en torno a 2 horas en las que podremos ver el curso del río Coroño en un relativo reposo hasta como se convierte en una catarata que cae desde unos 50 metros de altura en varios tramos, todo ello rodeado de viejos molinos que podremos recorrer cómodamente entre sus pasarelas de madera. Muy recomendable de visitar en otoño cuando el curso del río está en su plenitud caudal.

Para los apasionados de la historia, en las proximidades del alojamiento encontramos restos de las civilizaciones prerromanas de la zona del cual es perfecto exponente el Castro de Baroña e incluso monumentos megalíticos prehistóricos como el Dolmen de Axeitos.