Neila rural

Esta casita rural, que os proponemos, os espera en el pequeño pueblecito de Neila de San Miguel, dentro de la provincia de Ávila, ofreciendo como extras la desconexión del estrés, gracias a su reducida población, y un entorno repleto de cosas que hacer y visitar. Tenéis unas maravillosas vistas.

La vivienda está construida con los materiales típicos de la zona, dejando la madera y la piedra descubierta tanto en su fachada, de 2 plantas, como en el interior de la misma, dotándola de un toque rústico y con encanto.

Con una capacidad máxima de 2 personas, las estancias en su interior están distribuidas de la siguiente manera:

• Un área diáfana en la que se mezclan de manera muy inteligente, y manteniendo cada uno su espacio, el salón comedor, decorado con ladrillo visto y madera en vigas y columnas, teniendo un sofás y un sillón junto a una chimenea que contiene una estufa de pellets. 

• En la misma estancia, elevada por una doble altura, se encuentra la cocina, completamente equipada con todos los electrodomésticos y cachivaches que podáis necesitar.

• Un dormitorio de matrimonio amplio, decorado con muros de piedra descubierta y techos de madera. Con chimenea de pellets y maravillosas vistas.

• A través de un distribuidor, podrás acceder al cuarto de baño, que nos sorprende por la amplitud.

• Tenemos, para relajarte, una sala con un jacuzzi, cromoterapia y equipo de música en el que descansar y darnos un pequeño capricho.

Se admite una única mascota en esta casa.

Servicio wifi gratuito

En el exterior contamos con un patio de gran tamaño, acompañado por un merendero techado, en el que podréis degustar las increíbles carnes de la zona preparadas en nuestra barbacoa.

Esta casita rural os espera de puertas abiertas en el maravilloso pueblo de Neila de San Miguel, perteneciente a la provincia de Ávila, con tan solo 79 habitantes, por lo que nos asegura un descanso y una desconexión total de nuestra ajetreada vida cotidiana.

Se encuentra a tan solo 6 kilómetros de la estación de esquí de la Covatilla, para los más aventureros.

No tardaréis mucho en recorrer el pueblo, pero si en olvidar las maravillas que en él se esconden, teniendo muchos rincones con historia y de gran belleza, como la Iglesia, construida sobre una antigua atalaya vetona.

Para aquellos que disfrutéis de la naturaleza y el aire libre, os aconsejamos pasear por  los bosques y campos que pueblan nuestra comarca, sobre todo en primavera y otoño.

Los pueblos cerecanos que podréis visitar son, entre otros, el Barco de Ávila, Candelario e incluso Gredos.