Casas Rurales que Admiten Perros en Villamanrique De Tajo

La estancia una pasada, tiene mil y un detalles a cual mas bonito, la decoración de cada una de las habitaciones, los detalles en piedra de fachada y ventanales, las puertas, los muebles, el patio castellano, el restaurante con sus pinturas, la muralla, las lámparas espectaculares y un desayuno mas que completo. El trato de todos los hermanos fue exquisito, de lo más amables, y en especial Osta, no tengo palabras para describir su comportamiento con nosotros, un guía particular, un amigo, uno más de la familia.

Gran fin de semana en esta casa, tiene todo lo preciso para pasar una buena estancia con amigos o bien conjuntos grandes. La única queja, que creía que tenia lavaplatos y no había, y para un conjunto tan grande es un tanto rollo, y que le cama que nos tocó, cara bastante estruendos y estaba un tanto hundida, por el resto excelente, buen trato del dueño, y atención buenísima. Aprovecho para comentar que si procuráis como , olvidaros de cocinar, encargamos el alimento a el bar ``La Traviesa´´, administramos todo con Ruben, y fui un acierto, el alimento buenisima, y el coste muy accesible, el trato inusual, nos trajo hielos etc etcétera

La casa tiene guardeses lo que representa una gran ventaja ante cualquier situación que pueda surgir. La casa está muy bien puesta, con mucho gusto en la decoración y pensada para poder ir en grupos grandes, tanto los interiores como los exteriores de los que hemos disfrutado a tope. Muy cómoda para ir con amigos o familias grandes y para largas estancias.

Hemos estado de fin de semana en el puente de noviembre en este alojamiento en la zona sur de Madrid. La amplitud de la casa es impresionante, nunca habíamos estado en una con tantos baños y tan limpia. Hemos puesto la calefacción y funciona a las mil maravillas y si te hace falta más puedes poner la estufa de leña. Muy buena atención.

Pasamos el fin de semana del veintiseis de noviembre con la la familia para festejar nuestra boda, queriamos pasar un fin de semana imborrable todos juntos, gozar unos de otros en una casa rural en la que sentirnos como en nuestra casa en tanto que en nuestros "pisitos" de la villa de Madrid es imposible de hacer, y he de decir que lo logramos. Gracias Javier por todo, tienes una casa estupenda no solo bien montada por la parte interior si no también por fuera, con un enorme patio para gozar, con rincones singulares en donde conversar tomando un café bajo la vid, mientras que los pequeños jueguen en su casa de madera y los no tan pequeños con el futbolin y el billar, y también imagino que en verano con la piscina debe ser increíble.

Hemos pasado un fin de semana estupendo. Nos hemos alojado un total de quince adultos y una pequeña. Todos hemos gozado mucho. La barbacoa, el extenso patio (donde pusimos una pequeña piscina para la pequeña y otra para los adultos), el enorme salón (donde las noches se hacen verdaderamente cortas), las agradables "alcobas" (donde poder reposar a pesares que seas el único en hacerlo), la limpieza de TODA la casa, la afabilidad de la dueña, la accesibilidad al pueblo (exquisitos los dulces de la panadería de al lado), en resumen, TODO TODO y TODO.

Pasamos el puente de todos los santos en esta estupenda vivienda vacacional, no le falta ningún detalle. Los propietarios son super majos y muy amables, para los niños es la casa ideal, no los veíamos nada más que para comer. La sala de juegos está genial y lo mejor el karaoke con una infinidad de canciones para reirse un rato. La cocina es enorme, las habitaciones son bastante grande y los colchones mejores que los mios. Lo pasamos genial, fuimos más de 30 y aún sobraban camas.

Somos un conjunto de 8 amigos que pasamos el fin de semana del veintiseis al veintiocho de abril. Como la previsión del tiempo fue nieve, le insistimos a los dueños con la calefacción. Debo solicitar excusas, es la primera casa rural en la que he pasado calor. La nevada y la lluvia nos fastidió los planes y no pudimos a penas salir, mas en la casa gozamos de lo bonito de sus instalaciones, desde el hidromasaje que es una pasada, al karaoke y el billar del salón que nos salvaron el fin de semana.