Casas Rurales para Nochevieja en Palas De Rei

Es un sitio idóneo para pasar unos días, realmente bien situado. Las instalaciones están bien pertrechadas y muy limpias. Con un fabuloso jardín para reposar. El ambiente está realmente bien, a poquísima distancia de la playa y asimismo muy cerca de la Playa de las Catedrales (se puede ir dando un camino). Hemos recibido buen trato por la parte de los dueños.

La casa está muy cuidada y pertrechada, ideal para ir con pequeños tienen espacio donde jugar una finca privada, piscina y una sala común con juegos. Las habitaciones están realmente bien prácticamente todas con baño muy cuidadas. Tienen cunas y tronas para tomas. En suma una casa más que aconsejable para irse de escapada rural así sea con buen o bien mal tiempo, puesto que vale la pena aun quedarse en la casa y gozarla.

A Casa da Terra no es solo un alojamiento rural, es un sitio de crecimieto personal y espiritual por su ambiente, por la genial comida, por el trato recibido y por las múltiples actividades que puedes efectuar. Estuve una semana en el mes de agosto del dos mil trece con mi cánido en una de las cabañas ecológicas y la estancia fue excelente. Efectué actividades de meditación, de senderismo, nos bañamos en el río.

Pasar unos días en A Casa da Terra ha sido una experiencia hermosa, por muchos motivos. Solamente llegar deseas regresar pues solo el ambiente es ya alucinante, la casa hermosa y agradable, los dueños son seres fantásticos y el trato personal fue como estar en familia y entre amigos. Unas experiencias realmente agradables imposibles de olvidar. Os invito a que lo viváis, no os defraudará.

La estancia en esta casa rural fue sin sitio a dudas de las mejores experiencias de todo el fin de semana. Presenta todo género de comodidades que , personalmente, no he encontrado en otras casas y todo está impecable. La piscina es espléndida y que decir de la fabulosa sala de juegos en donde pasar una tarde... en suma si procuran un sitio donde quedarse a lo largo de su estancia en Melide, no deberían dudar ni un instante en reservar esta casa rural.

Nos alojamos allí durante una semana en el mes Diciembre. Estuvimos en la suite Lareira que es homónimo de: relaz, paz, privacidad, confort y limpieza. No tuvimos nada que rompiera la tranquilidad de nuestra estancia, auqnue sí que es verdad que en la cabaña contigua se hospedó una pareja a lo largo de dos días. Ahora bien el dormitorio donde se duerme está separado del salón que es la única estancia del alojamiento que coincide con la otra cabaña.

tanto el dueño como la persona encargada de darnos las llaves muy afables la casa cuando llegamos estaba calentita, ya nos habían puesto la calefaccion, que en pleno diciembre se agradece bastante y pero incluso yendo con pequeños la casa es tal como se muestra en las fotografías, el salon es pero grande de lo que se ve en la fotografía pudimos gozar de la zona exterior, también donde esta la chimenea y el horno, si bien no lo empleamos, a mayores te cobran la leñá a 3h la caja en la cocina hay todo cuanto puedas precisar en lo que se refiere a platos, vasos,potas, etc las habitaciones amplísimas de la misma manera que los baños la fuente esta justo en la entrada de la casa, sabia riquisima, hasta nos llevamos para casa Fuimos múltiples parejas con pequeños y quedamos encantados con ganas de regresar para verano El único pego que le pondriamos es que tenga una piscinita

Hemos pasado unos días del mes agosto hospedados en Balboa, Monterroso y nos ha encantado conocer las tierras lucenses. El alojamiento es muy bonito y lo encontramos limpio. Los exteriores de la casa rústica son encantadores con un patio cuidado hasta el más mínimo detalle en el que hemos desayunado todos los días. Desde el jardín, la puesta de sol es impresionante. Nosotros lo pasamos genial jugando con los niños, leyendo, dibujando y haciendo fotos que han quedado preciosas. La vivienda está aislada, pero muy cerquita del pueblo, de manera que se descansa fenomenal, es muy tranquilo de noche.