Casona Dos Lagos

Esta antigua torre medieval del siglo XI, reformada para convertirse en una casona de estilo cántabro, y ahora habilitada como alojamiento rural, se encuentra en Villanueva de Villaescusa, a 6 kilómetros de Santander, justo donde empiezan las rutas de los Valles pasiegos. Rodeada de un entorno montañoso con lagos y arboles centenarios, es un encantador alojamiento donde se conjugan lo rústico de la construcción y la decoración con la modernidad del equipamiento y los servicios, que harán sentir al huésped que ha llegado a su nuevo hogar, desde el cual descubrir los encantos de Cantabria.

Los alojamientos y zonas comunes están repartidos en varios edificios. En total dispone de 11 habitaciones y un apartamento independiente, situado en la antigua casa del guarda; pueden hospedarse aquí hasta 36 personas y disfrutar cómodamente de todos los servicios.

Hay  dobles estándar, con 2 camas individuales y dobles de matrimonio cada una y salida a un balcón con vistas al jardín.

Hay, además, una habitación doble superior, con una cama de matrimonio, con cuidada decoración, bañera hidromasaje y mobiliaario antiguo, balcon que da al jardín.

Para familias o grupos más grandes, la casa dispone de 6 habitaciones en los jardines familiares para 3 personas. Esta habitación reparte sus plazas entre una cama doble y una cama individual. Las situadas en la planta baja tienen salida directa al jardín y las de la planta alta unas impresionantes vistas

También hay una habitación cuádruple donde se puede disfrutar de un parque en la entrada con jardín, columpios y aparcamiento.

Se suma otra habitación familiar, esta para 5 personas, repartidas entre 3 camas individuales y una familiar, situadas en 2 dormitorios separados, para familias más grandes que no quieran renunciar a la intimidad de sus miembros.

Todas las habitaciones, aparte de sus diferentes capacidades, disponen de una serie de servicios que son coincidentes en todas ellas, como es el caso de la televisión. A ninguna le falta un baño privado, completamente equipado, donde encontrarán toallas y secador de pelo, además de un lote de artículos de aseo gratuitos.

En la zona de descanso, visible desde la cama, hay una televisión de pantalla plana. Además, la señal de wifi alcanza todas las estancias, de manera que se puede acceder a internet desde cualquiera de ellas. En las camas no faltan sábanas y la calefacción garantiza unas temperaturas agradables por mucho frío que haga en el exterior.

Se puede disponer en algunas estancias de camas supletorias, hasta una por habitación, por un precio que variará dependiendo de la edad del ocupante.

Por último, está el apartamento, distribuido en 2 niveles y con capacidad para 6 o 4 personas. En uno de los dormitorios encontrarán 2 camas individuales y en el otro una cama doble, y en la sala de estar habrá un sofá cama de 2 plazas, para completar el cupo.

En la planta baja los huéspedes encontrarán un espacio amueblado como salón comedor, con mesa y sillas para comer, y una televisión de pantalla plana frente al sofá cama. Es un espacio perfecto para reunirse a charlar, ver la televisión o conectarse a internet.

Separada del salón por una isla de desayuno se encuentra la cocina, con perfecto equipamiento que no echa en falta ningún electrodoméstico ni ningún cubierto. Además de mantenerse bien alimentados, los huéspedes podrán lavar su ropa y permanecer cómodos durante estancias más largas.

El cuarto de baño de la casa dispone de ducha, y viene equipado con toallas, secador de pelo y productos de aseo, cortesía de la casa.

Se puede, además, disfrutar de una serie de espacios comunes para todas las casas. Hay un salón con chimenea y una pequeña biblioteca, para pasar el rato relajado leyendo tranquilamente al amor de la lumbre. Hay también una televisión,  para entretenerse en compañía.

La casa dispone de una zona de párking privada, que puede emplearse gratuitamente y sin necesidad de reservar. El recinto admite mascotas de manera gratuita, previo aviso y bajo petición, no en todas las estancias se admite mascota

Existe un bar-restaurante con comedor y una terraza en el jardín. Será en el comedor donde se sirvan los desayunos, caseros y abundantes, y los clientes podrán degustar soberbios platos de la gastronomía típica cántabra. En el jardín podrán sentarse a comer o a descansar, disfrutando del aire libre y de las espléndidas vistas del lago y los amplios jardines de antiquísimos árboles.

La casona se encuentra en una ubicación perfecta para disfrutar de muchos puntos de interés de Cantabria sin tener que pasarse horas en el coche.

Santander se encuentra a 6 kilómetros y se tarda menos de 15 minutos en llegar. Entre su oferta turística, destaca el Museo Marítimo y el Palacio de la Magdalena, y nadie a quien le guste la playa debería perderse la del Sardinero.

A 5 minutos de la casa se erige el Parque de la Naturaleza de Cabárceno, un entorno naturalizado donde un centenar de especies animales viven y conviven en régimen de semilibertad.

Santillana del Mar se encuentra a 20 kilómetros de distancia, y es esta villa marinera un enclave lleno de historia y cultura, desde la Colegiata de Santa Juliana hasta las Cuevas de Altamira, sin olvidar su zoológico con unas mariposas espectaculares.

Puede optar por viajar por la costa oriental de Cantabria hasta Castro Urdiales, pasando antes por las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel, cuyos ríos forman estuarios y barrancos llenos de vida y hermosos paisajes.