Casa Priscila

Esta casa rural levanta sus paredes en Monte de Breñas, un precioso municipio en La Palma.

Con capacidad para 2 personas – ampliable a 3 a través de sofá-cama – este alojamiento es ideal para aquellos que busquen una escapada en pareja con olor a salitre. La casa se presenta con una arquitectura en una única planta baja, con paredes blancas en su exterior, además de marcos de madera en puertas y ventanas. Todo ello bajo el sustento de las tejas que abrigan el techo. Sin embargo, en su interior es la madera la que se lleva el protagonismo en lo que a diseño y estructura se refiere, dotando al hogar de unos techos de dicho material en forma piramidal.

Vamos a conocer más detalladamente cada una de las estancias:

• Un dormitorio: doble, con 2 camas individuales. Exterior, con mucha luz, pues dispone de 2 ventanales, uno lateral y otro en el cabezal de la cama. Para la noche, imponente lámpara de vela. La madera es el material protagonista, con presencia en el mobiliario y en acabados y marcos.

• Zona de estar: un amplio sofá para 3 personas se asientan frente al ventanal con inmejorables vistas. Suelos de barro cocido.

• Cocina – comedor: por un lado el sitio donde cocinar, por otro, en el que degustar. La cocina despliega todas sus armas a partir de una alargada encimera. Esta da cobijo a todos los electrodomésticos del lugar. Junto a la cocina, mesa de madera de roble, junto a un mueble bar con toca discos.

• Baño: con toallas y ducha.

A todo esto, cabe añadir la presencia de un exterior que quiere, sin duda, ser también protagonista de tus días:

• Piscina: rodeada de naturaleza, vegetación y hamacas. De fondo, el mar ¿qué más se puede pedir?

• Jardín: con terraza, ideal para disfrutar del aire fresco y los olores del mar y la naturaleza.

Villa de Mazo te invita a reflexionar, al silencio, a la naturaleza, al sonido de las olas, al olor a salitre, y a actividades nacidas a partir de los senderos que rodean la isla.

Además de múltiples puntos de visita obligada, como por ejemplo:

• Museo Casa Roja: con la mejor muestra de bordados de la isla.

• Playas de Santa Cruz de La Palma y Los Cancajos: dejate envolver por las playas de arena negra.

• Cuevas Belmaco: con las pinturas de nuestros antepasados.