Casas Rurales con Barbacoa en Laroya

Muy recomendable este complejo rural en el que hemos pasado unos días de abril y todo ha salido a pedir de boca. La hospitalidad y el trato de los anfitriones está a la altura de los alojamientos del cortijo que son preciosos. Nos regalaron a nuestra entrada un huevos frescos (aún tenían plumas) y unas patatas de huerta que estaban deliciosas, además de una mermelada de mora.

Hemos estado unos días de junio en este hotelito y sólo podemos aconsejarlo a todo el mundo. La situación es maravillosa para conocer todas las playas del Cabo de Gata y el trato que allí se dispensa una maravilla. Mención especial a los desayunos que te podían servir como base para todo el día.

Ha sido un fin de semana de alquiler en mayo muy bueno, en buena compañia, bién atendidos por el propietario y disfrutando de la naturaleza y la tranquilidad. Los cortijos son de muy buena calidad y parece que estás solo porque ni siquiera se escucha al vecino. Os animo a que conozcais éste lugar, si lo que os interesa es pasarlo bién y disfrutar.

Los propietarios son muy buena gente, serviciales y auténticos. La casita rural, "El Pajar" es muy bonita y se está agustísimo. La relación calidad - precio es estupenda para un alquiler de agriturismo de estas características. Lo tenías todo a mano y sólo tenías que relajarte y disfrutar.

Nuestra opinión sobre esta casita que forma parte de un conjunto es muy positiva. Hemos conseguido encontrar la ansiada tranqulidad que el día a día no te permite vivir en estas casitas bien equipadas e inmersas en plena naturaleza. Ramón ha sido un amor con nosotros, se ha portado muy bien y ha estado muy pendiente de que el fin de semana de alquiler no nos faltase nada.

Si buscaís un entorno de montaña recóndito para perderos unos días y disfrutar de la paz y la tranquilidad necesarias para recargar pilas y volver con fuerzas de unas vacaciones os recomiendo este alojamiento. Para nosotros ha sifo todo un descubrimiento porque nos encanta el turismo rural y lo hemos pasdo muy bien. La casita es pequeña, lo que la hace muy acogedora, pero no echarás nada en falta. La guinda del pastel lo ponen los desayunos que sirven en el Mesón la Acacia, al ladito y los amaneceres desde su terrada. Precioso.

Hicimos un alquiler de esta casa durante una semana y nos encantó por lo divertido de su decoración y lo bein puesto y cuidado que está todo, han ido un paso más allá a lo que es una alquiler vacacional convencional y se lo han currado. A pesar de pasar sólo dos noches, hemos disfrutado mucho tanto mi marido como yo del jacuzzi, muy recomendable si nunca habéis hecho una escapada de este tipo. Ubicado en Laroya, tendremos que volver porque a pesar de ser un entorno my bonito no hemos salido prácticamente para disfrutar del alojamiento todo lo que hemos podido.

En ese lugar mágico, encantado, perdido en la sierra de los Filabres, encontré la paz y el sosiego que tanto necesitaba. Llegué de viaje excéptico y me fui enamorado del entorno y de sus gentes, lamentablemente vivo lejos y los imponderables laborales dejan en el aire cuando pordré volver, día que sueño. Del cortijo rústico, de su limpieza y entorno acogedor, nada que objetar y mucho que aplaudir del mismo y de quien lo regenta, su educada, culta y atenta dueña Doña Antonia Media, que hace la estancia en Laroya entrañable e inolvidable.

Laroya es un pueblecito almeriense con un encanto especial y con unas gentes muy amables, comenzando por el anfitrión que nos ayudó a oganizar visitas y excursiones para hacer turismo rural por la zona (porque a pesar de lo que piensan algunos, Almería no es únicamente playa). Paz, relax y unas vistas de infarto en una zona preciosa que tenéis que conocer. El cortijo está muy bien montado a nivel de decoración e instalaciones. Querréis volver.

Merece la pena el alquiler, por suerte fue más de lo que esperábamos. En definitiva salimos todos muy contentos, estuvimos en la suitte Jaraiz con su jacuzzi, ¡qué gozada! Fue solo una semana de relax, fresquito y algún kilito que me traje de vuelta de este viaje. Espero que volvamos pronto. Loli se ha portado estupendamente con nosotros, un abrazo de corazon y gracias por la semana tan bonita y por lo que hiciste disfrutar a mi bebé.

La casa es aún mejor de lo que parece, animaros a reservarla aunque sea por un fin de semana porque merece la pena hacer una escapdita rural con relajación total de este tipo para reavivar la relación. El hidromasaje es de los mejores en lo que he estado y tiene cromoterapia y distintas funcionalidades que os impedirán salir del agua. Las velas flotantes todo un detalle por parte de los anfitriones Antonia y Manuel.