Casas Rurales Románticas en Picos de Europa

Si bien tarde, ahí va nuestra opinión. Lo mejor de nuestra estancia no fue ni la casa, ni las vistas desde la ventana, ni el entrecierro, ni la limpieza, ni tan siquiera los paisajes asturianos...Lo mejor fue llegar a "casa" cada noche, y salir del turismo con prisas para poder ver si Miguel regaba sus plantas, darnos una ducha bien veloz para bajar a cenar bajo el horreo y tomarnos una sidra casera hecha por Miguel, y sobretodo gozar de su compañía, la de Luisa, su mujer, y naturalmente la miedosa Lola (al final nos ganamos su confianza).

Hola Amigos: Todo ha contribuido a que a lo largo de nuestra estancia todo haya sido de nuestro agrado, el trato por la parte de las dueñas, las condiciones generales de la casa, su amplitud, su cuidado aspecto, el asesoramiento para actividades lúdicas y gastronómicas por la zona, que ofrece multitud, la calma de la zona, cercanía a núcleos más grandes como Cangas de Onís sin estar metidos en Cangas, la compañía de buenos amigos en la casa, etcétera