Casas Rurales que Admiten Perros en Toledo

Sin ningún género de dudas quedamos encantados. Fuimos 2 parejas con nuestras pequeñas de cuatro años y nuestro can. A la casa no le falta de nada, mas de nada es NADA. Nos sentimos como en nuestra casa o bien mejor. Todo eran detalles. La casa es hermosa, tanto por la parte interior como por fuera. Es cálida y agradable, y nos hubieramos quedado allí a vivir. Que paz!! Los dueños una maravilla, y Gloria (su hija) un auténtico encanto.

Al estar la casa rural Miel y Romero tan magníficamente pertrechada y decorada con gusto, fue realmente agradable el preparar y servir la cena de final de año y el alimento de año nuevo sin agobio, tranquilamente y con amplitud. La calefacción funcionaba realmente bien como la chimenea y, a pesar del frío ambiental, dentro se estaba muy caluroso. La casa deja la agradable convivencia y al mismo tiempo la privacidad por el hecho de que las cuatro habitaciones son extensas y tienen un estupendo baño integrado.

Quería conocer Castilla-La Mancha con mi mascota, y la verdad es que acerté al elegir esta finca. Aparte de la tranquilidad y sosiego del lugar, la comodidad de sus habitaciones, desde allí se pueden hacer excursiones en el día a Toledo, a Consuegra con sus Molinos de Viento en lo alto del Cerro, un paseo muy bonito, e incluso a Tomelloso donde hay unos vinos y quesos riquísimos.

Un casa completísima con muchos baños un jardín a la perfección cuidado una barbacoa chulísima y unos sofás muy cómodos, el dueño un hombre muy majo y jovial, se preocupa y nos escribió tras el viaje para poder ver que tal nos fue, un trato una calidad y un coste razonable.

La finca es muy grande y realmente bonita. Fuimos seis matrimonios con once pequeños y lo cierto es que estuvimos muy bien. La instalación es tan grande, que gozamos de un absoluto relax en tanto que los pequeños no tuvieron tiempo de aburrirse entre, visitar los caballos, la pequeña esquina con los animales de la granja, el parque de juego con arena, columpios, tobogán etcétera., y la enorme pradera jugando al futbol .

Casa ideal para pasar unos días con los amigos o bien en familia. Cocina grande y lumínica para comer todos juntos, un salón muy agradable y habitaciones amplísimas y realmente bien decoradas. A resaltar el salón de juegos donde pasar un buen rato jugando al billar, futbolín, dardos o bien echando unas risas con el karaoke. Y asimismo a resaltar, sobre todo para los que vamos con pequeños, el enorme patio cerrado con columpios donde los peques pueden campar a sus anchas.