Casas Rurales con Piscina en Sierra de Gata

Excelente trato, comodidad absoluta, contacto pleno con la naturaleza, grado de intimidad máximo, ha sido todo un gran descubrimiento conocer este lugar, sin duda alguna volveré. Muy simpáticos Luis y María. La comida buenísima y totalmente sana y ecológica. Tanto si vienes de ciudad o de pueblo y quieres desconectar del día a día es el lugar idílico para hacerlo.

Rodeados de fantástica naturaleza de ensueño, entre olivos, bellas encinas,espectaculares alcornoques, lindas ovejas, varias gallinas, dos cerdas, hectáreas de terreno con cientas escenas diferentes en todos y cada rincón, parcelas con estatuas naturales formadas por las hermosas rocas que invaden el ambiente, rincones donde soñar, donde crear, donde reposar...millones de imágenes en todos y cada atardecer que te dejan transportar a otro planeta, un planeta lleno de paz donde todos habríamos de estar alguna vez, sintiendo la esencia de la humanidad, de la creación de la tierra, del sentido de la vida.

Hemos estado seis personas a lo largo de una semana a fines de julio y ha sido un sitio ideal para desconectar de la rutina diaria. La casa Los Prados esta ubicada en un bosque de castaños y robles, idóneo para poder dar paseos por el ambiente o bien bajar hasta el pueblo (2km). Juan Carlos ha estado en todo instante a nuestra predisposición, muy próximo y afable. Todo, la casa, el ambiente, los lugares visitados,.

La finca rústica está muy cuidada, en un sitio ideal muy protegida del frío de la sierra. La vivienda turística tiene todo lo necesario para pasar una estancia súper agradable. Las naranjas son un lujo hacerte un zumo recién cogidas del árbol. La chimenea siempre encendida sin ningún problema de leña, si se te acaba los dueños siempre estaban pendientes para reponerla. Volveremos en abril para disfrutar del olor de la flor de azahar.

Hemos pasado un bonito fin de semana de este otoño en la Sierra de Gata. Efectuamos actividades de senderísmo entre Castaños, Robles y Alcornoques, visitamos pueblos de sierra como San Martín de Trevejo, Gata y Acebo. Hemos quedado muy sorprendidos de esta zona, del colorido de su campo, de los paseos llenos de hojas de un otoño único y de diferentes colores. Nos alojamos en esta bonita Casa Rural de Sietevillas, donde todo estaba preparado al detalle para satisfacción de sus huéspedes.