Casas Rurales con Chimenea en Monells

Hemos pasado unos días muy realmente agradables. Nos ha agradado mucho la casa y el ambiente. Aconsejable.

Hemos vuelto de Perro Puigmiquel encantados de la vida y con las pilas cargadas. El paisaje es paradisiaco, del mismo modo que la casa en la que estuvimos. El tiempo acompañó e inclusive pudimos gozar de la barbacoa del jardín y de las tumbonas. Los pequeños se lo pasaron a lo grande, corriendo por el césped, jugando en los columpios y haciendo castillos de arena. La hospitalidad de los dueños está a la altura del alojamiento: genial.

Unos amigos nos aconsejaron Cánido Puigmiquel como lugar ideal para familias y ya hemos estado 2 veces: en verano y en Semana Santa. La experiencia ha sido increíble: calma, ambiente fantástico, Monells, la Bisbal y el propio Sant Sadurní y, sobretodo, un jardín magnífico con piscina, columpios y barbacoa que han transformado Cánido Puigmiquel en el destino preferido de nuestros hijos.

Deseo compartir con aquellos que, como mi compañera y , sean amantes del turismo rural, la agradable experiencia que hemos vivido el pasado fin de semana del Pilar en Perro Vilà de Madremanya. Madremanya es un pueblecito medieval construido íntegramente en piedra situado en un ambiente idílico al pie del macizo de las Gavarres i Perro Vila está ubicado a unos quinientos metros del mismo a la vera de un pequeño bosque, en una planicie desde la que en el horizonte se divisa el mar.

El sitio es increíble, no se que afirma la del comentario precedente, lo he encontrado muy limpio... Nosotros hemos ido 2 días con los gatos y la familia y hemos paseado por el bosque -que es bello- y hemos dormido super bien, el sitio es recóndito y sigiloso. Lo único, si tienes un turismo bajo, cuidado pues es una pista forestal. En nuestro caso, como tengo un cupé, la dueña nos subió en su 4x4 y deje el turismo en espinelves.

Nos ha agradado mucho esta casa rural. Es amplísima y está realmente bien lista para un conjunto de catorce-dieciseis personas. Las habitaciones son amplísimas y los jergones son muy comodos.Es una casa novísima. Tiene mucho espacio exterior y esta ubicada a la vera de Peratallada, que es un pueblo de los pero bonitos de la zona. Al lado asimismo está Pals que es otro pueblo medieval hermoso.

Recién llegados de Pero Tarres y ya con ganas de retornar nuevamente. Pisos plenamente aconsejables, espaciosos, independientes, bien decorados con personalidad propia. Gran espacio exterior para disfrute de grandes y pequeños: piscina, cama flexible, barbacoa, futbol, montaña, bosque, burros, ponis, conejos... Pueblos medievales cautivadores a poquísima distancia, masías, castillos dalinianos.

Pasamos una apacible semana entera de abril con la familia en Tarres. Está perfectamente ubicado para conocer toda la costa Brava, a sólo 20 minutos en coche. Se respira completa tranquilidad en la masía, no faltaba nada en el alojamiento, cómodo, amplio y agradable. David y Rosa, siempre dispuestos para responder y ayudar con cualquier necesidad. Muy recomendable.