La Pinta - Los Cerros de Santa María

Este alojamiento se ubica en Santa María de Alameda y tiene una capacidad de 8 personas. Podréis alojaros en sus 4 habitaciones dobles y pasar vuestro tiempo en el salón comedor con chimenea, un espacio muy amplio en el que también se encuentra la cocina. Desde aquí se llega al porche, otra zona espaciosa donde disfrutar al aire libre. Está dividida en 2 pisos donde se disponen todas sus estancias.

La zona del salón se encuentra al fondo de la estancia, en la planta baja. Tiene las paredes de color blanco y cuenta con 2 sillones, uno de 3 plazas y otro de 5. Están situados alrededor de una mesa pequeña y delante de la cristalera que da al porche.

Al lado del sofá de mayor capacidad, e integrada en la pared, se encuentra la chimenea, que tiene a su lado un cesto para guardar la leña. También hay otros muebles como mesas y sillas. Uno de los muebles tiene 3 baldas y sobre él se sitúa la televisión.

Al lado de la otra salida al porche, más cercano a la puerta principal, se encuentra la mesa del comedor, con capacidad para 6 comensales. Al lado de esta tenéis la cocina, pegada a la pared. Esta cuenta con:

• Encimera alargada de color naranja con muebles bajos y de pared y una pequeña ventana. El fregadero es un hueco hondo que se abre en medio de la encimera.

• Para evitar la tarea de fregar los platos y cubiertos después de cada comida podéis usar el lavavajillas.

• Al lado de este gran electrodoméstico encontraréis otro que también os permitirá hacer buenas elaboraciones: el horno.

• Sobre este se encuentran los fuegos y el extractor de humo, y al lado, colgado, está el microondas.

• Otros dos utensilios que vienen muy bien son la plancha y para los desayunos más completos, la tostadora.

En esta misma planta encontraréis 2 habitaciones y un baño:

• Una con 2 camas individuales cuyos cabeceros son de madera y tienen un adorno con barras curvas en el medio. En un lateral está la ventana que cuenta con un visillo estampado y enfrente de ambas camas se sitúa un armario amplio de madera, con 2 puertas y cajones.

• La otra habitación también es doble, tiene 2 camas individuales que se encuentran una junto a la otra. Comparten cabecero, que es de madera y tiene espacios rectangulares. Cuenta con 2 mesillas con lámparas pequeñas y un armario muy amplio delante de las camas, con 2 puertas, un cajón grande y 2 pequeños. A su lado encontraréis una televisión, perfectamente colocada para verla tumbados.

• El baño está totalmente equipado, con una ducha con mampara transparente, que tiene a sus lados el inodoro y el bidé, sobre el que se sitúa una pequeña ventana para que se ventile bien el aseo.

Subiendo por las escaleras llegaréis al primer piso. Aquí también hay 2 habitaciones dobles y un baño:

• En el primer dormitorio hay 2 camas individuales, separadas por una mesilla con una lámpara de noche, y que tienen cabeceros de madera con adornos en forma de ‘X’. Delante de ellas hay un espacio amplio y una cajonera con un espejo encima. En la pared lateral encontraréis la salida a su pequeño balcón para asomaros y disfrutar del aire fresco de la zona.

• El segundo también tiene 2 camas individuales, esta vez, unidas y con un cabecero común rectangular de color marrón oscuro. Cuenta con un par de mesillas de noche y salida a su balcón propio. Delante hay una cómoda con varios cajones donde podréis guardar vuestra ropa. Encima hay un espejo colgado.

• El baño en esta planta tiene bañera, con una mampara  de cristal para evitar que salga el agua durante la ducha. El lavabo se sitúa sobre un mueble con 2 baldas y encima tiene colgado un espejo rectangular.

La zona exterior es muy amplia, idónea para poder pasear y ver los bonitos paisajes que rodean al alojamiento. Desde el porche podréis desayunar o tomar algo, sentados cómodamente en los sillones de fuera y viendo las montañas de Madrid.

Santa María de la Alameda está junto a la sierra, en concreto, la de Guadarrama, por lo que los paisajes montañosos están a la orden del día. También se pueden visitar sus calles y edificios, como su iglesia o su plaza, que indica el centro del pueblo.

Si queréis probar su gastronomía, no podéis perderos las tapas que ponen en sus bares de patatas revolconas y también los famosos torreznos. Además, la zona son típicos los platos de carnes como ternera y cabritos y también las setas, por ejemplo, los níscalos y los boletus.

Otra opción es ir a visitar el monasterio del Escorial, ya que se encuentra muy cerca de este pueblo y es una oportunidad única y un destino turístico que nadie se quiere perder.

Por último, viajar a la capital es otro de los grandes planes que ofrece el entorno. Visitar los museos de Madrid o sus emblemáticos lugares como la Plaza Mayor, es una de las mejores formas de invertir vuestro tiempo.