Casa rural El Rincón de la Olvido

Esta casa rural levanta sus muros en el pueblo de Vellisca, perteneciente a la provincia de las Casas Colgadas, Cuenca. 

Con una capacidad para 11 personas, es el alojamiento adecuado para ir con la familia completa o con los amigos a pasar unos días de descanso y tranquilidad envueltos en todas las posibilidades que ofrece la casa.
Ese lojamiento hogareño está formado por 3 pisos que albergan las estancias necesarias para hacer que los huéspedes se sientan como en su propia casa.

En el piso bajo de la casa encontramos:

• Una sala de estar formada por 2 sillones negros con capacidad para varias personas, en el centro  se encuentra una pequeña mesa blanca. Lugar indicado para relajarse después de un largo día y reunirse con la familia o los amigos a charlar.

• Junto al salón, se encuentra el comedor. Una gran mesa de madera pintada en blanco, rodeada de varias sillas, permiten a los inquilinos un asiento para disfrutar de una comida especial alrededor de la mesa.  Una televisión plana situada encima de un mueble de madera permite a los clientes poder ver una película o algún programa de actualidad. 

• Una cocina americana, en el mismo espacio que el salón y el comedor, se encuentra delimitada por el inicio de las escaleran que suben a la entreplanta. Totalmente equipada y con vitrocerámica, cuenta con todos los electrodomésticos necesarios para curbir las necesidades de los inquilinos.

• 3 dormitorios dobles con baño interior en cada uno de ellos. 2 de los dormitorios están formados por una cama de matrimonio, mientras que el dormitorio restante cuenta con 2 camas individuales. Las habitaciones son grandes y espaciosas y están decoradas en tonos pastel. 

• 3 cuartos de baño completos en cada una de los dormitorios. La casa pone a la disposición de los huéspedes las toallas. 

En la entreplanta se disponen las siguientes estancias: 

• 2 dormitorios dobles, uno de ellos con cama de matrimonio y el otro con 2 camas individuales. Disponen de armarios para guardar el equipaje. Son espacios cálidos que invitan al descanso por la comodidad de sus colchones. Al igual que en el piso bajo, la decoración está basada en los tonos pastel.

• Un cuarto de baño completo totalmente equipado y para el uso compartido de las 2 dormitorios de la entreplanta. 

Existe la posibilidad de solicitar una cama supletoria.

Por último, uno de los lugares más especiales de la casa, la buhardilla, pensada exclusivamente para el entretenimiento de los huéspedes. Decoración en madera y  con grandes ventanas que iluminan el espacio, se convierte en el sitio idóneo para reunirse y entretenerse con las diferentes alternativas que te ofrece. Una televisión de plasma, situada frente a 2 grandes sillones, permiten convertir el espacio en un pequeño cine. Un pequeño tenis de mesa es el entretenimiento ideal tanto para adultos como para niños. 
Sin duda, uno de los espacios más característicos y bonitos de la casa.

En el exterior, un patio con zonas cubiertas y zonas sin techo, da la posibilidad a los huéspedes a que disfruten de una comida al aire libre en una de las mesas que se ponen a su disposición. Además, para los días de sol, una gran sombrilla. Uno de los componentes fundamentales del patio es la barbacoa, que permite organizar una comida que a todos gusta en el exterior de la casa.

Vellisca es el pueblo en el que está ubicada la casa.  Se trata de un pueblo pequeño con apenas 200 habitantes que viven de la agricultura. Las ermitas y las iglesias son alguno de los monumentos que se pueden ver si se da un paseo por el lugar.

A unos pocos kilómetros se encuentra la ciudad de Cuenca, conocida por sus Casas Colgadas ya que son el elemento más característico de la cuidad. Además, cuenta con diferentes plazas y jardines por los que pasear mientras disfrutas de las vistas de una de las ciudades más características de la Península Ibérica. 

Con respecto a su gastronomía, está basada en la comida de los pastores, pudiendo saborear platos como la perdiz en todas sus variantes o el ajoarrero, elaborado con bacalo y ajos. 

Una ciudad sencilla pero muy bella, envuelta por la esencia de sus habitantes, siempre hospitalarios ante la cantidad de turistas que reciben.