Casa da Barreira

Esta casa rural, situada en Sotomayor, Pontevedra, y rodeada de un entorno idílico y perfecto para los amantes del deporte, la naturaleza, cultura y gastronomía, nos ofrece una experiencia única plagada de detalles magníficos. Construida en piedra, siguiendo la tipología de la zona y la época, nos da una primera sensación buenísima, invitándonos a entrar en ella.

En su interior, se mantiene la atmósfera rústica gracias al mantenimiento de las paredes en piedra descubierta, mezclada con la madera de techos y la decoración con objetos labriegos de gran antigüedad y valor, manteniendo una paleta de colores cálidos y acogedores.

Las estancias y distintas zonas comunes de la casona se distribuyen entre las 2 plantas de la siguiente manera:

• Una sala de estar en la que nos encontramos con una mesa enorme de madera, para hacer las labores de comedor, junto a unos sofás que rodean una maravillosa chimenea de piedra que aportará el calor en la época más fría y creará ambiente entre los invitados.

• Un pequeño salón con sofás y muebles de madera, en la planta superior, dispuestos alrededor de una televisión.

• Una cocina amplia y espaciosa, decorada en madera y preparada con todos los electrodomésticos y el menaje necesarios para mantener el nivel alto del resto de la vivienda.

• Una habitación doble y 4 de matrimonio, todas ellas con televisión y un cuarto de baño con todas las comodidades manteniendo así la intimidad de cada persona pese a ser una casa con una capacidad máxima de 14 personas, gracias a la posibilidad de añadir 4 camas supletorias.

En el exterior tenemos grandes jardines en los que podremos pasar grandes ratos tanto mayores, dando uso a la barbacoa techada o dándonos un chapuzón en la piscina, como los más pequeños en nuestra zona de juegos.

Cabe la posibilidad de alquilar el apartamento que se encuentra pegado al resto de la casa pudiendo unificar y ampliar la capacidad hasta 19 personas.

Esta casa rural situada en Sotomayor, provincia de Pontevedra, con poco más de 7000 habitantes, se ve rodeada de un entorno natural y vegetal, increíblemente paradisíaco. Permitiéndonos disfrutar, a los más amantes de la etnología, de sus exquisitos albariños, gracias a su cercanía a las Rias Baixas, que le otorgan su denominación de origen.

Para aquellas personas que busquen actividades en las que se mezclan la naturaleza, arquitectura y el encanto propio de la zona, no nos podemos olvidar de lugares como el castillo de Soutomaior, caminar hasta el puente colgante, lugar perfecto para desconectar o sobrecogernos con las vistas que nos da el mirador La Pineda.

Pero no solo obtenemos una opción cultural y de excursión, sino que podemos acercarnos a pasar un día fantástico a la playa más cercana, tan solo a 4 kilómetros, e incluso visitar y aprovecharnos también de las playas de las Islas Cies a 25 minutos.