Casa Ana

¿Os apetece disfrutar con toda la pandilla de los maravillosos paisajes del Delta del Ebro? Os invitamos a hacerlo en nuestra casa, situada en Deltebre. 

La casa está aclimada para disfrutarla en cualquier temporada: para el verano, dispone de aire acondicionado y piscina exterior; para las temporadas de invierno, de calefacción y chimenea. 

Consta de capacidad para un máximo de 12 personas, distribuyendo su interior entre 2 plantas, y contando en el exterior con una amplia finca vallada.

Conózcamos la planta baja:

• Salón con cocina americana. Es una estancia diáfana en la que se unifican varios ambientes: un rincón de relax con chimenea y televisión para las tardes de cine, una mesa de comedor para comer en compañía, y una cocina de concepto abierto equipada el día a día.

• 3 Dormitorios. En esta planta hay un dormitorio triple (con 3 camas de tipo individual), uno doble con 2 camas sencillas, y otro más con cama de matrimonio.

• 2 Cuartos de baño. Disponen del equipamiento habitual para la higiene, además de artículos de aseo como cortesía, toallas incluidas.

En la planta superior se sitúan:

• 3 Dormitorios. El primer dormitorio de esta planta consta de 3 camas sencillas; el segundo, de una individual; y, el tercero, de cama matrimonial. Este último, además, cuenta con un baño privado y una sala de estar abuhardillada. 

Saliendo al exterior disfrutaréis de:

• 2 Terrazas: la primera se encuentra bajo un porche cubierto; la segunda, al descubierto. Disponen de sillones de jardín, acompañados por mesas para comer y de barbacoa para cocinar. 

• Jardín con piscina: durante las temporadas de verano no hay nada mejor que refrescarse con un buen baño, saldréis como nuevos. 

Nuestra casa se encuentra en la urbanización de Riumar, en las afueras del pueblo de Deltebre. Su privilegiada ubicación os permitirá llegar en pocos minutos a la playa de Riumar: un arenal que se prolonga durante 4 kilómetros rodeado de dunas de color dorado. Junto a ella, hay un paseo marítimo y varios chiringuitos para tomaros un refresco. 

Además, nos encontramos a las puertas del Delta del Ebro, un espacio protegido de gran riqueza natural. En su paisaje, abundan los campos de arroz, que sirven de refugio para numerosas especies de aves. 

En el interior del parque hallaréis itinerarios muy bien señalizados que os llevarán a conocer los rincones más emblemáticos del Delta. No olvidéis la cámara de fotos, porque seguro que no querréis perder detalle. 

Si queréis combinar la playa y la naturaleza con el turismo de interior, podéis daros un paseo por la ciudad de Tortosa, situada a poco más de media hora.