A Casa de Alicia

Nuestra villa os espera impaciente en el pueblo gallego de Ribadumia, más concretamente en la comarca pontevedresa de A Aldea da Bouza, teniendo como acompañantes la tranquilidad de su reducida población y la belleza de su entorno natural.

La fachada ha sido construida en piedra descubierta en tonos tierra, rota por el rojizo de las tejas, de 2 plantas y rodeada por una parcela de gran tamaño en la que encontramos:

• Un porche amueblado desde el que tenemos unas vistas espectaculares de la piscina y la nontaña.

• Una piscina de agua salina, acompañadas por hamacas donde poder disfrutar de unas hermosas vistas a la RÍa de Arousa.

•  Un hórreo típico.

• Un patio con mesa y sillas de madera, que aportan una atmósfera acogedora.

• Una pequeña casita en la que encontramos una cocina con barbacoa totalmente equipada. En el esterior una carballeira con una bonita mesa de piedra ideal para comer al aire libre.

Con una capacidad de 6 personas, las estancias en el interior de la vivienda están distribuidas de la siguiente manera:

• Un salón de gran tamaño con sofás en tonos tierra frente a una chimenea y televisión.

• Una cocina completamente equipada con todo lo que necesitemos para preparar nuestros platos favoritos, acompañada por un office, con mesas y sillas de madera cubiertas en blanco.

• 3 dormitorios, uno con cama de matrimonio y 2 con un par de camas dobles. Todos decorados con un gusto exquisito, al igual que el resto de la vivienda y teniendo sus propios cuartos de baño completos y de gran tamaño, disponen de todas las comodidades.

• Un aseo, completo con sanitario y lavabo, aparte de los cuartos de baño de las habitaciones.

El pueblecito de Aldea da Bouza, dentro de la parroquia de Ribadumia, en la provincia de Pontevedra, teniendo una población que no supera los 200 habitantes, que asegura el descanso que tanto necesitamos, acoge nuestra maravillosa vivienda.

Si buscamos un turismo destinado a la cultura, podemos pasear por el propio pueblo y fascinarnos con la belleza de sus estructuras arquitectónicas, como la Iglesia de Santa Baia de Ribadumia, o los típicos hórreos de la zona. Si queréis viajar en el tiempo, deberíais acercaros al Monte do Castro, con restos celtas.

Para quienes disfrutéis de la naturaleza más libre y salvaje, tenemos el río Umia, que atraviesa el pueblo y cuya ribera sirve como camino para disfrutar de las estampas de la zona.

Existe también, una ruta de senderismo llamada Ruta da Pedra e da Auga; y a muy poca distancia podréis tener un día magnífico de playa en Sanxenxo, O Gorve, Isla de Arosa, Isla de Ons, Islas Cíes.